Un “gabinete de curiosidades” es un espacio donde se narran historias y donde la realidad y la fantasía convergen; es un lugar que evoca remembranzas, experiencias y leyendas.
Encontramos entre los objetos en la instalación: un biombo japonés del periodo Edo, unas cortinas que representan partituras Shipibo-Konibo, del Ucayali; unas mantas africanas y otras provenientes de Pisac y del Tíbet; exclusivas piezas de cerámica y objetos producto de la creatividad y del coleccionismo, que inspiran exploraciones.