En un espacio donde la funcionalidad se encuentra con la estética, estas imágenes revelan una cocina contemporánea que se presenta como el corazón del Hotel Boutique en CASACOR, un lugar donde el diseño trasciende la mera utilidad para convertirse en una declaración de estilo.
Por Julio Pérez-Novoa | Fotos Marcel Suurmond
Con una paleta cromática que combina tonos neutros y maderas cálidas, los materiales elegidos por Caroline Feldman y Kathy Cárdenas evocan una sensación de acogimiento, mientras que las superficies de piedra aportan un contraste de frescura.

La iluminación juega un papel central, destacando los detalles arquitectónicos y realzando las texturas. Este diseño no solo celebra la belleza de los materiales, sino también refleja un compromiso con un estilo de vida consciente y equilibrado.

Las líneas minimalistas de los muebles integrados se complementan con elementos inesperados como una torre de cultivo vertical, que introduce un toque de naturaleza y sostenibilidad al espacio.

El diseño del comedor mantiene la coherencia visual, pero introduce un aire más relajado con una selección de sillas de diseño audaz y una combinación de textiles que aporta profundidad y carácter.
La presencia de vegetación cuidadosamente ubicada y luminarias colgantes de cristal soplado otorgan al espacio una sensación de ligereza y modernidad.

Cada elemento parece haber sido escogido con una intención clara, creando un equilibrio perfecto entre forma y función.
Los electrodomésticos de alta gama se integran sutilmente en la composición, mientras que los detalles como los tiradores invisibles y las puertas enchapadas con efecto espejo reflejan una atención rigurosa al detalle.

En el contexto de este diseño, el espacio no solo es un escenario para la preparación de alimentos, sino también un lugar de encuentro y conexión.
La distribución abierta y fluida fomenta la interacción entre quienes habitan el hogar, mientras que las líneas claras y los materiales nobles evocan un sentido de tranquilidad y orden.

Esta cocina encarna la esencia de la modernidad, donde la innovación y la tradición se entrelazan para ofrecer un espacio que no solo es funcional, sino también profundamente inspirador.
Una representación exquisita de cómo el diseño de interiores puede transformar lo cotidiano en algo extraordinario, invitando a quienes la habitan a experimentar la belleza en cada detalle.