Perú Sensorial de Serfor Perú y Mincetur diseñado por DOF Arquitectos y Lima Botánica en CASACOR Perú 2025 ofrece un paréntesis.
Es una forma de habitación que celebra la calma con naturalidad y propone una reconciliación entre naturaleza, tradición y contemporaneidad.
Por Julio Pérez-Novoa | Fotos Sebastian Aparicio
La disposición del mobiliario, generoso y modular, invita a permanecer. Cada asiento está anclado sobre bases de madera natural que no ocultan sus vetas ni su origen.

Los textiles, seleccionados con esmero, hablan en bordados, tramas y colores de una identidad que no necesita explicarse para sentirse presente.
Cojines con motivos inspirados en geometrías vernaculares conviven con tapices artesanales, cerámicas, y fibras suspendidas desde el techo como un coro de hilos que vibran con la luz.

La experiencia es táctil, visual, incluso sonora: un equilibrio silencioso entre materiales nobles y vegetación viva.

El lenguaje arquitectónico se expresa en gestos contenidos. Las grandes ventanas restauradas permiten que la luz natural sea parte activa de la narrativa.

Las paredes, neutras, se convierten en telón para los objetos; y el suelo, de madera continua, refuerza la idea de continuidad y arraigo. Es una escenografía sin artificio, donde cada pieza parece haber encontrado su lugar con naturalidad.
Pero lo esencial está en el modo en que este espacio logra conectar lo cotidiano con lo ritual. Cada rincón está pensado para acoger, para compartir, para detenerse. No hay divisiones estrictas entre el estar, el contemplar y el conversar.

La mesa de comedor se extiende como un gesto de bienvenida, flanqueada por sillas de diferentes estilos que se reconocen en su diversidad. En otra zona, los objetos colgantes de cerámica adoptan forma de aves, trayendo consigo una alegoría de ligereza y libertad.

Este ambiente propone una nueva forma de bienestar, una estética que busca reconectar. Es una lección de diseño silencioso, de belleza sutil y pertenencia profunda.
Como todo lo verdaderamente esencial, se descubre en el gesto lento de mirar con atención.