Espacio dinámico y cambiante, creado con elementos contradictorios, yuxtaponiendo plantas silvestres y exóticas que se recorre a través de un sendero sinuoso, delimitado por cantos fabricados con materiales renovables.
Grandes maceteros albergan y dan una segunda oportunidad a árboles frutales rescatados de la expansión urbana y cambio de cultivos. Un área rústica para el descanso y contemplación conecta con el espacio del huerto casero. Un jardín ordenado, planificado y con propósito, abrazado por la arquitectura existente.